HISTORIAS ANTIGUAS, CULTURAS Y COSTUMBRES: LA JOVEN DE CASA DALMAU

miércoles, 9 de junio de 2010

LA JOVEN DE CASA DALMAU

Existe en Rocallaura una leyenda según la cual hace muchísimos años habitaba en los alrededores del pueblo un dragón, una horrible fiera con siete cabezas, a 1a que era preciso entregar todos los años una muchacha virgen.
La infeliz a quien tocara en suerte ser entregada al dragón, podía despedirse de los suyos, porque ya jamás volvían a verla. Ninguna de las que se había llevado había vuelto.
Por más que repugnara a los vecinos del pueblo esta obligación de entregar todos los años una muchacha al dragón, no tenían más remedio que conformarse, ya que si dejaban de hacerlo, la fiera les arrasaba las cosechas, devoraba sus rebaños y los arruinaba por completo, sembrando el terror por todas partes.
Por este motivo llegaron al acuerdo de sortear entre todas las muchachas, cuando llegaba el día fijado por el monstruo, la que debía sacrificarse, y a la que le tocaba en suerte, de ninguna manera podía negarse a cumplir su sacrificio.
Había entre todas una de singular belleza y mucha bondad, hija de un rico colono. La casa que habitaba la joven con sus padres era conocida con el nombre de «Can Dalmau», y aún hoy existe en Rocallaura una casa de ese nombre.
Un año correspondió a esta joven ser entregada; así, aunque estaba ya prometida en matrimonio, no tuvo más remedio que resignarse con su suerte y, rompiendo su compromiso, entregarse a la horrible fiera.
La muchacha, antes de despedirse de sus padres y de su prometido, fuése sola al campo y, arrodillándose, se puso a rezar con gran fervor a San Jorge, de quien ella habla oído contar que había librado del dragón a una joven.
Mucho rato llevaba arrodillada rezando, cuando vio bajar del cielo un caballero vestido de blanco y montado en un soberbio caballo del mismo color.
Levantóse, maravillada, y el caballero, apeándose, se acercó a ella y le dijo que podía marcharse a su casa tranquilamente, que nada temiera del dragón, porque él la libraría y, con ella, a todas las muchachas de Rocallaura.
Montó de nuevo a caballo, y dirigiéndose a la cueva del dragón, peleó con él y lo mató. Y así libró, como había dicho a la joven de Casa Dalmau, a todas las doncellas de Rocallaura.
 

No hay comentarios:

Publicar un comentario

DEJA TU COMENTARIO SEBRE ESTE ARTICULO